Adéntrate en el desierto y ayuda a un arqueólogo a encontrar las valiosas joyas de Tin Han, la princesa atlante, para devolvérselas al pueblo tuareg.
Nombre de la empresa: Inside Escape Room
Nombre de la sala: Tin Hinan, la princesa atlante de los tuareg
Número de jugadores: 2-6 personas (sin opción a combate)
Precio: 50€ - 96€ (en función del número de jugadores)
Duración: 75 minutos
Hace unas semanas os contábamos qué tal había sido nuestra experiencia en los Apartamentos Riverblood y que, al terminar esta peculiar visita, conseguimos el primer sello del pasaporte Escapa hacia la Sierra. Por si algún despistado aún no ha oído hablar de esta ruta escapista, la forman un total de 6 empresas del Norte de Madrid y, jugando al menos una sala de cada una de ellas, se entrará en el sorteo de 900€.
Más allá de lo tentador que sería ganar un premio así (tenemos tan mala suerte en los sorteos que si esa fuese nuestra única motivación nunca participaríamos en ninguno), teníamos ganas de seguir descubriendo mas salas del Norte de la capital, por lo que reunimos a nuestros amigos escapistas más cercanos y organizamos una pequeña excursión hasta Manzanares El Real, donde nos esperarían nuestros dos siguientes retos: "Tin Hinan, la princesa atlante de los tuareg" (Inside Escape Room) y "La Mazmorra Mental" (Escape Room Manzanares El Real).
Dado que en total éramos 8 personas, decidimos dividirnos en dos equipos. El equipo número 1 lo formábamos Paco y yo junto a los chicos de El Bosque (Mindtrap) y nuestro primer reto sería "Tin Hinan, la princesa atlante de los tuareg". Mientras tanto, el equipo número 2, en el que estaban Fer y Manu junto a Cris y Nando (escaparquieroescapar), intentarían escapar de "La Mazmorra mental". ¿Alguien ha dicho competición? Que vaaa.... Para naaaada.
La reserva
Centrémonos por tanto en el objetivo de nuestra aventura y hablemos de Tin Hinan y del misterioso arqueólogo que quiere devolver las joyas de la princesa al pueblo tuareg. Si vosotros también queréis ayudar en esta altruista tarea, la mejor forma es organizando vuestra propia expedición al desierto, lo cual podréis hacer a través de la página web de Inside Escape Room.
Como en todo viaje, debéis indicar qué día queréis realizarlo y los datos de contacto de una de las personas. Si bien no es necesario que en el momento de hacer la reserva indiquéis cuántos seréis, sí es de ayuda que digáis cuál es vuestra experiencia en este tipo de misiones, ya que se asegurarán de prepararlo todo para que se ajuste a vuestras necesidades. Por último, deberéis abonar una señal de 30€ para completar vuestra reserva, pagando el resto de importe el día de la expedición.
Local, historia y objetivo
Como si de un convoy se tratara, llegamos a Manzanares El Real en tres coches distintos, aunque ninguno de nosotros tuvo problemas en aparcar junto a la Plaza del Pueblo, un punto estratégico que se encuentra a medio camino entre el local de Tin Hinan y el de La Mazmorra Mental (las cuales se encuentran a 5 minutos andando la una de la otra). Dado que contábamos con algunos minutos de margen, Eli, Juan, Paco y yo aprovechamos para hacer un poco de turismo, ya que no conocíamos el pueblo (todo sea dicho, algo imperdonable por mi parte, siendo madrileña...) y terminamos nuestro pequeño paseo delante de la puerta de Inside, la cual no tendréis ningún problema en reconocer en contraste con el entorno rural que tiene alrededor.
Tras llamar al timbre e identificarnos tal y como se nos había pedido en el email de confirmación de la reserva, pudimos acceder al interior del local donde, de manera sencilla e integrada en la historia, nos dieron toda la información necesaria para que nos preparásemos y estar así listos para comenzar nuestra aventura. Como no podía ser de otra forma, antes de internarnos en el desierto, nos recordaron por qué estábamos allí: Cuenta la leyenda que Tin Hinan, una princesa atlante, consiguió sobrevivir a la desaparición de la Atlántida y se refugió con la tribu de los tuareg, que la veneraron como su reina. Cuando llegó la muerte de la princesa, fue enterrada con sus joyas pero, sabedora de la codicia de la gente, las más preciadas fueron ocultadas por orden suya para que no cayesen en malas manos. Pasado el tiempo y olvidado su paradero, solo aquel que las devolviese a su pueblo sería merecedor de ellas.
Ambientación y juegos
Tras poner un pie en el interior de la sala, nuestras reacciones fueron muy parecidas y se mezclaron al mismo tiempo una serie de comentarios del tipo "ohhhh", "wooow" o "vaya pasada" y es que, aunque no nos encontrábamos en un desierto real (nos ahorrábamos el calor sofocante), estábamos en una sala que conseguía recrearlo estupendamente y, al momento, entendimos la recomendación que incluyen en su página web sobre ir con ropa cómoda y calzado cerrado (Juan, la próxima vez te insistiremos más sobre ello). Se notaba que cada pequeño detalle (y os aseguramos que no eran pocos) había sido hecho con todo el cariño y, lo mejor de todo, es que prácticamente todo lo que encontrabas en la sala tenía una función o un sentido perfectamente integrado con la historia.
En cuanto a ambientación se refiere, a lo largo de las muchas salas que hemos jugado, hemos visto dos tipos de tendencias: las salas que empiezan con una ambientación llamativa y van perdiendo fuerza a medida que avanzas por el resto de estancias o, el caso contrario, salas que empiezan de manera discreta y acaban con una sorpresa final. Sin embargo, son pocas las que consiguen mantenerse a lo largo de la toda la experiencia (Mina de Quintana, El Bosque...) y Tin Hinan, es sin duda una de ellas.
En cuanto a los juegos, encontraréis un buen equilibrio entre aquellos más clásicos y todo tipo de mecanismos modernos, que harán que hasta el rincón menos sospechoso esconda algún que otro secreto. En nuestro caso se dieron un par de situaciones en las que dijimos esa típica frase de escapista resabiondo de "es imposible que ahí vaya a haber algo..." para segundos después ver que sí que lo había. Otro de los puntos fuertes que tiene la sala en cuanto a juegos es el elevado número que hay de ellos (de ahí que el tiempo total sean 75 minutos), algo que han aprovechado estupendamente para incluir juegos muy variados entre sí, tanto a nivel de dificultad como en la forma de resolverlos.
La sala cuenta además con un diseño multilineal, lo que os permitirá dividiros y avanzar en paralelo con varios enigmas, algo que os recomendamos si no queréis ir demasiado apurados de tiempo. Precisamente porque podréis resolver varios juegos a la vez y porque la sala cuenta con infinidad de detalles integrados, os recomendamos que mantengáis una buena comunicación con el resto de jugadores, ya que puede ser fácil pasar por alto una pequeña pista que un compañero necesite para resolver su enigma o que acabéis mezclando pistas de diferentes juegos. Nosotros tuvimos un par de momentos de ese estilo y, aunque de uno de ellos pudimos salir victoriosos por nosotros mismos, para el otro necesitamos la ayuda del Game Master, quien supo darnos la pista idónea para reconducirnos y que diéramos con la solución. El sistema de pistas es a través de audio, no encontraréis ninguna pantalla ni cronómetro que quiten realismo a la aventura. ¡Inmersión total!
En resumen, esta sala es una pequeña joya (perdonadme el chiste fácil...) a la que cuesta sacarle un "pero" en cualquiera de los elementos principales con los que creemos que debe contar un buen Escape Room (ambientación, juegos, inmersión, fluidez...) para la que sin duda alguna merece la pena desplazarse hasta Manzanares El Real y que consideramos dentro de las "imprescindibles" de Madrid. Tanto por temática como por el tipo de juegos, creemos que se adapta a todo tipo de públicos y el tamaño de la sala hace que sea perfecta para grupos de 3-5 personas con distintos niveles de experiencia.
¿Lo conseguimos?
Nuestras andanzas por el desierto acabaron, como toda buena película de Hollywood, con un momento de tensión (echamos en falta un poco más de intensidad) en el que las cosas se ponen complicadas para los protagonistas, pero del que pudimos escapar sanos y salvos junto a las joyas de la princesa.
A la salida pudimos hablar con Fermín, quien había sido nuestro Game Master y que nos sorprendimos de encontrar perfectamente caracterizado a pesar de haber terminado ya el juego. Juntos repasamos algunos de los momentos más característicos de la sala y les preguntamos sobre la posibilidad de abrir una segunda sala más adelante. ¡Acabábamos de salir de la primera y ya estábamos deseando que hubiese una segunda! Parece que no es una idea del todo descabellada por lo que esperaremos pacientes porque sin duda alguna volveremos.
Valoración y puntuaciones
- A destacar: El tamaño de la sala y el nivel de ambientación que se mantiene a lo largo de toda ella. El mimo y cuidado que hay en cada rincón y lo bien integrados que se encuentran los distintos elementos de la sala para, de una manera u otra, formar parte del juego. La intervención del Game Master en el momento necesario, dando las pistas de manera muy correcta para orientarnos.
- A mejorar: La ambientación de la recepción para conseguir que la experiencia sea 100% inmersiva desde el primer minuto. Aumentar la tensión en la recta final del juego, ya que no tiene demasiada fuerza, así el "subidón" a la salida sería aún mayor. Darle una vuelta a uno de los juegos finales que hay que hacer de manera cooperativa, ya que no es del todo intuitivo.
Opiniones de otros jugadores: TripAdvisor
Datos de contacto:
Calle Cañada, 35, 28410 Manzanares el Real, Madrid
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