Accede al laboratorio NorthHope para descubrir la amenaza que acecha Barcelona y sintetizar la vacuna que ponga fin al virus. ¡Deprisa! ¡Los zombies llegarán pronto y están hambrientos!
Nombre de la empresa: Fear Escape Room
Nombre de la sala: Zombie Outbreak
Número de jugadores: 2-8 personas (sin opción a combate)
Precio: 70-136€ por sala (en función del número de jugadores)
Duración: 80 minutos
Cuando decidimos pasar unos días de vacaciones en Barcelona, nos imaginamos haciendo fotos por Las Ramblas, disfrutando del mar o chupándonos los dedos después de comer unos deliciosos calçolts. Nada más lejos de la realidad, desde nuestra llegada a la capital condal habíamos tenido que huir de un perturbado doctor, luchar contra fantasmas en un viejo hotel o acudir en ayuda de Batman (parece que él sí que estaba disfrutando de unas vacaciones como Dios manda), entre otra serie de locuras.
Fer, Manu, Paco y yo vivíamos con miedo nuestras últimas horas en la ciudad preguntándonos qué más podría pasar. ¿Una invasión alienígena? ¿El inicio de la III Guerra Mundial? ¿La llegada de un tsunami que lo arrasase todo? Aunque no acertamos con ninguna de nuestras hipotésis, nuestra siguiente aventura tampoco se alejaba de los habituales tópicos a los que Hollywood o Netflix nos tienen acostumbrados. ¡Un nuevo virus se había propagado por la ciudad provocando que los ciudadanos se conviertan en zombies! Con urgencia se solicitaba la ayuda de todos los científicos que en ese momento hubiese en Barcelona, por lo que Fer y yo sacamos nuestras batas, gafas y guantes de químicos y nos dirigimos a las instalaciones de Fear Escape Room sin perder ni un minuto.
La reserva
Si vosotros también tenéis conocimientos científicos con los que poder ayudar a encontrar la cura al virus zombie (tranquilos, piden menos nivel que para concursar en Ahora Caigo, por lo que será suficiente con la cultura básica del colegio o instituto), podéis reservar vuestra plaza como investigadores a través de la página web de Fear Escape Room.
Una vez seleccionado el día y hora en que acudiréis al laboratorio, debéis indicar el número de científicos que compondrán vuestro equipo de investigación y pagar la tarifa correspondiente por vuestros servicios (¡para que veaís lo mal que está el mundo i+D que se paga por investigar en lugar de cobrar por ello!). Prestad atención a las indicaciones de la web para aseguraros de que la misión se adapta lo mejor posible a vuestras preferencias, ya que podéis elegir realizarla con o sin componentes de miedo, además de que se advierte que la misión conllevará una dificultad muy alta si sólo sois dos personas .
Local, historia y objetivo
Las instalaciones de Fear Escape Room son las que alojan el laboratorio al que debéis acudir y éstas se encuentran en el barrio de El Guinardó, a pocos minutos andando de las estaciones de metro de Maragall (Líneas 4 y 5) y de Guinardó / Hospital de Sant Pau (Línea 4). En nuestro caso, dado la urgencia de la misión, fuimos hasta allí en coche y no tuvimos problemas para aparcar a escasos metros de la puerta, por lo que es una alternativa a tener en cuenta.
Cuando llegamos a la puerta, nos sorprendió ver que la cosa ya se había puesto bastante fea por aquella zona de la ciudad y que los vecinos habían empezado a tomar serias medidas para protegerse de los zombies. Tras entablar conversación durante unos minutos con un curioso paisano, decidimos adentrarnos en el interior del laboratorio para no retrasar más nuestra misión. Allí nos recibió uno de nuestros compañeros del equipo táctico que, perfectamente equipado y caracterizado en el papel que representaba, nos indicó que sería nuestro apoyo en caso de necesitar ayuda durante la investigación, nos dio algunas instrucciones de seguridad que no debíamos olvidar durante el desarrollo de la misión y nos informó de cuál era nuestro objetivo: Desde que el virus zombie llegó a la ciudad, la corporación ha tomado todos y cada uno de los laboratorios microbiológicos de Barcelona. Reclutaron a todo el personal científico operativo pata que sintetizase una vacuna, pero alguien desde dentro saboteó la operación. El equipo táctico Tango3 se ha adentrado en las instalaciones, aparentemente desalojadas, y necesitan personal científico cualificado para estabilizar la situación y conseguir sintetizar una vacuna que acabe con el virus.
Ambientación y juegos
Si la inmersión en la historia había sido completa desde antes incluso de entrar en la sala gracias a un fantástico pre-game e intervención del Game Master, aquella sensación no decayó lo más mínimo al entrar en el laboratorio o durante los siguientes 80 minutos que duró nuestra experiencia. Sabemos que conseguir algo así es realmente complicado y creemos que la clave del éxito se basa en que han conseguido encajar a la perfección toda una serie de elementos como son una buena ambientación, juegos de luces y sonidos, enigmas fluidos e integrados en una historia con giros, interpretación por parte del Game Master y nivel de tensión. ¿Que se dice rápido y parece fácil? Ya os adelantamos que no lo es.
En cuanto a ambientación se refiere, Zombie Outbreak ha conseguido sacarme la espinita que tanto tiempo llevaba clavada como química que soy, ya que se trata de la primera sala que he visto que consigue recrear con realismo un laboratorio científico. Para todos aquellos que no habéis estado en uno, os lo adelanto: poner unas paredes blancas llenas de fórmulas, una percha con una bata y una mesa con una balanza, un microscopio (si estamos de suerte) y unos tubos de ensayo de colores... no es un laboratorio. Otros de los puntos fuertes respecto a la ambientación es que el jugador no tendrá ninguna duda de qué representan los distintos espacios por los que avanza a lo largo de su aventura y que todas estas localizaciones consiguen transmitir el caos y tensión que uno esperaría encontrar cuando los habitantes de una ciudad se están convirtiendo en zombies y amenazando con acabar con el resto de ciudadanos vivos. ¡Marie Kondo se escandalizaría si lo viera!
Para avanzar a lo largo de las instalaciones del laboratorio NorthHope y conseguir sintetizar la vacuna, tendréis que interactuar con los elementos que os rodean y ayudaros de ellos para acercaros a vuestro objetivo. Muchos de estos elementos integrarán enigmas, algunos de tipo lógico y otros más físicos, pero su simbiosis es tan buena y tan acorde a la historia que estáis viviendo que en pocas ocasiones tendréis la sensación de que estáis allí para resolver puzles, sino para detener una verdadera amenaza microbiológica. Ya sean juegos lógicos o físicos, clásicos o mecánicos (los cuales también tienen muy buen equilibrio dentro de la sala), todos ellos se caracterizan por ser dinámicos y requerir la buena comunicación entre los miembros del grupo. Os aconsejamos que mantengáis la cabeza fría para organizaros bien ya que en algunos momentos la cantidad de información que os rodea puede ser agobiante, aunque os adelantamos que eso no será nada sencillo gracias al fabuloso trabajo que hace el Game Master manteniendo el nivel de tensión durante toda la experiencia. Sabiendo lo gallinas que somos, no os sorprenderá si os decimos que en más de una ocasión pusimos a prueba nuestras gargantas con algún que otro grito y que estábamos tan alerta que cualquier movimiento extraño nos hacía saltar de miedo. ¡Si hasta nos asustábamos sin querer entre nosotros al tocarnos!
Como en toda buena película o serie de zombies, no tendría mucha gracia si los protagonistas fuesen todo el tiempo juntos en grupo para protegerse. ¿Qué pasaría con esos momentos de tensión en los que alguien se descuelga del grupo y descubre por sí mismo una nueva pista o amenaza? De la misma forma, en Zombie Outbreak será necesario que os dividáis durante la mayor parte del tiempo si queréis avanzar lo suficientemente rápido. Pero no os preocupéis, porque trabajo hay para todos y os aseguramos que nadie tendrá las manos o el cerebro quieto durante más de unos pocos segundos. Por esta razón, creemos que el número idóneo de jugadores es algo superior a lo que estamos acostumbrados y que la experiencia es perfecta para grupos con experiencia de 4 personas o grupos algo más novatos de 5-6 personas. Por la dificultad de los juegos y lo multilineal que es la sala no creemos que sea la más idónea para parejas o novatos pero… ¡de valientes está lleno el mundo y nosotros no desanimamos a nadie!
¿Lo conseguimos?
La popular frase “divide y vencerás” sigue siendo tan útil como en tiempos de Julio César y nos permitió sintetizar la vacuna y sobreponernos a todos los imprevistos que fueron surgiendo con bastante margen, aunque nosotros lo viviéramos con la misma intensidad que Bruce Willis cuando sólo le quedan 3 segundos para destruir el meteorito que acabará con la Tierra.
Cuando nos reencontramos con nuestro Game Master, Yerai a partir de ese momento, nos contó que la sala, como si de un videojuego se tratase, se compone en realidad de tres misiones/logros diferentes que los jugadores no conocen hasta que acaba la experiencia, por lo completarlas o no con éxito depende de las acciones que inconscientemente realizan durante toda la aventura. ¡Menuda sorpresa nos llevamos cuando nos dijo que habíamos hecho pleno!
Como recompensa, en la foto final aparecen como recuerdo los tres logos correspondientes a las tres misiones que conseguimos. Si vosotros ya habéis jugado la sala, estamos seguros de que los reconoceréis sin problema.
Valoración y puntuaciones
- A destacar: La inmersión desde el primer segundo hasta el último gracias al papel del Game Master, al nivel de tensión que no decae y a la integración de los juegos con la sala. Gran nivel de ambientación y equilibrio entre los distintos tipos de juegos.
- A mejorar: Aunque se nos ocurren pocas cosas que mejorar de la experiencia, nos sorprendió que hay un espacio bastante amplio dentro de la sala que no forma parte del juego y que podría utilizarse, por ejemplo, para ampliar la duración del juego para grupos con más experiencia.
Opiniones de otros jugadores: TripAdvisor
Datos de contacto:
Av. de la Mare de Déu de Montserrat, 199, 08041 Barcelona
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